Enrique "El Mellizo"

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Francisco Antonio Enrique Jiménez Fernández (n. Cádiz, 1 de diciembre de 1848 - † Cádiz, 30 de mayo de 1906), cantaor más conocido como Enrique "El Mellizo".

Biografía

Nació en la calle Mirador,más concretamente en el número 26. Sus padres eran Francisco Antonio Jiménez y Carlota Fernández. Se bautizó el día 5 de diciembre de ese mismo año, en la parroquia de Santa Cruz, llamada la Catedral vieja de Cádiz, siendo sus padrinos Enrique Ortega Díaz y Carlota Feria Ruiz y testigos Francisco Jimenez y Sebastian de Feria.

Mosaico con las Genealogías de los Jimenez y Ortegas

Con respecto a su apodo El Mellizo no se sabe exactamente a qué se debe. No tuvo un hermano gemelo, ni tampoco su padre. Al parecer, ese apodo lo utilizaba su padre, cuando trabajaba en la casa de "Matanzas" o matadero municipal de Cádiz, , trabajo que seguiría luego el propio Enrique

Casa de Matanzas ó Matadero Municipal

, pero hay otra versión, ademas esta es de transmicion oral de padre a hijo en la cual según me contó "Chico Mellizo" -mi padre , que era su nieto - que lo de El Mellizo le viene porque Su padre Francisco Antonio Jimenez Rodriguez, era mellizo con un tío suyo, osea hermano de su padre. También hay opiniones que dicen que el apodo le vino del mundo de los toros.

Nombre

Enrique "El Mellizo"

Fecha de nacimiento

1848

Lugar de nacimiento

Cádiz

Profesión

Cantaor
Enrique "El Merllizo".jpeg

Enrique se casó el 8 de Febrero de 1874 con Ignacia Ezpeleta Ortega ,hija del torero Francisco Espeleta Machuca y de la cantaora Jacoba Ortega Diaz "La Jacoba". De esta unión nacen

Antonio Jimenez Mellizo.jpg
ENRIQUE JIMENEZ HERMOSILLA.jpg
  • Carlota Jimenez Espeleta.

Además según el libro "Enrique El Mellizo y su entorno", de Fernando Mirá Gutiérrez , El Mellizo tuvo además una hija, Maria del Loreto que falleció a los 8 años, Maria de los Dolores que falleció con treces meses, Maria del Carmen con seis meses y tres hijos mas que solo le duraron días, Ignacio, José Vicente y Carlota. Siendo aún muy joven, Enrique "El Mellizo" comenzó a trabajar en el Matadero Municipal, donde tomó contacto con el mundo de los toros, conociendo a buenos aficionados, banderilleros y matadores, despertando en él una afición que conservaría hasta los últimos años de su vida. El matadero estaba situado en el Barrio de Santa Maria de Cádiz, junto a la que fue Carcel Real, exactamente en el lugar que hoy ocupa la carismática Peña Flamenca “La Perla”. Intervino como puntillero en las cuadrillas de El Laví y El Marinero, para más tarde hacerlo con la del matador Manuel Hermosilla y Llanera. Su debut como puntillero fue el día 18 de julio de 1876, en la Cuarta plaza de Toros de La Hoyanca , que estaba ubicada frente a la escuela lasaliana de "La Mirandilla" de Cádiz.

Poco a poco, alternando su dedicación a los toros con su trabajo en el Matadero, se fue adentrando en el mundo del cante, para lo que demostró magníficas cualidades. Su alto sentido de la musicalidad flamenca fue, poco a poco, despertando la admiración de cuantos le escuchaban, sin olvidar el mundo de los toros al que también seguía ligado.

Precisamente en una fiesta en honor del torero Hermosilla, de quien "El Mellizo" era además amigo íntimo, dada en Jerez de la Frontera, conoce a Antonio Chacón el 25 de julio de 1886 quedando prendado de su cante y de quien será su valedor principal para que “el joven jerezano” actúe en la famosa Velada de los Ángeles en el actual Parque Genovés.

Salió poco de Cádiz, aunque se le consideraba un auténtico maestro en toda Andalucía; económicamente se ayudaba en los cafés de cante locales. Tuvo fama de raro, un hombre que caía con frecuencia en terribles depresiones, y entonces se convertía en un ser solitario que se iba a dar largos paseos o se metía en una iglesia vacía a escuchar la música del órgano o los cánticos religiosos. Entonces se iba por el Campo del Sur (Cádiz) a la Iglesia de Santa Catalina en el desaparecido Hospital Psicriatico de Capuchinos a cantarle a los locos, o se iba a la muralla a cantarle al agua. La enorme belleza del cante del Mellizo, aunque no llegara a grabar ninguna composición, es unánimemente reconocida. Se dice de él, que era analfabeto, pero hay constancia de que por lo menos sabia firmar, ya que en un documento de la época, cuando era matarife del matadero, hicieron un pliego escrito todos los empleados pidiendo una paga extraordinaria, y en este documento apreciamos la firma de él.

Aquejado de tuberculosis, enfermedad que lo consumió poco a poco, Enrique "El Mellizo" falleció en la calle Torno- llamada hoy, Teniente Andujar-, un 30 de mayo de 1906. Fue enterrado al día siguiente en el Cementerio de Cádiz, acompañado de un inmenso gentío

Su aportación al flamenco

El Mellizo en realidad no inventa nada, como algunos de sus biógrafos menores han pretendido afirmar. No inventa las alegrías y mucho menos los tientos. El hace algo mas extraordinario, encarnando la pura esencia de la suprema creatividad gitana: transforma y ordena sonidos haciendo de puente imprescindible entre sones arcaicos y populares, pero ya flamencos, excepción hecha de la saeta, en sonidos que se presentan como referentes obligados para que el cante llegue a donde hoy lo conocemos.

Sus aportaciones genéricas se refieren a la consolidación de los aires gaditanos y de la Bahía como distintos de los de Jerez o Triana, en el sentido de más cortos, más valientes y sobre todo más rítmicos y armoniosos.

Saetas

En general todos los estudiosos consideran a "El Mellizo" como el personaje clave para conocer la saeta en su formato actual. Ello no quiere decir que el marchamo presente en su totalidad se la diera el gaditano. Muchos otros, inspirados en su cante, caso de Chacón, Centeno, Torre o Pastora, lo han culminado. Lo que hace Enrique es contribuir a aflamencar lo que era un canto litúrgico popular, que con el tiempo desaparece como tal, dando lugar por el contrario al desarrollo contemporáneo de la saeta.

Alegrías

Se cantaban en Cádiz cuando nació "El Mellizo". Habían evolucionado hasta aflamencarse, partiendo de la jota de Cádiz[1] desarrollándose como cante para baile. Enrique le aporta su sello especial haciendo la cantiña más pausada, majestuosa y rítmica.

Tientos

El origen de este cante, de los últimos en evolucionar dentro del acervo flamenco, ha sido controvertido. Conviene aclarar que su existencia musical no va más allá del siglo y cuarto y conociéndose con el término de tiento no llega a los cien años. En Cádiz comenzó llamándosele tango tiento (es decir, tango lento), para perder el nombre de tango y quedarse con el adjetivo.

Hay autores que le atribuyen su creación al cantaor jerezano Diego "El Marrurro" y otros a Enrique "El Mellizo". La realidad es que la aportación del Marrurro no la conoce con certeza nadie. No obstante, es muy probable que fuera el primero en enlentecer, dándole solemnidad y patetismo, a los tangos. "El Mellizo" haría, como en tantas ocasiones, el resto. Le daría la forma como ha llegado a nosotros.

Malagueña

La malagueña[2] de "El Mellizo" es la de más majestuosidad, solemnidad y dificultad musical de cuantas se han desarrollado. Y el número ronda la cuarentena. Sobre su origen hay dos teorías: la tomó de la melodía del romance de Bernardo el Carpio- tenemos un archivo sonoro, donde José de los Reyes "El Negro", un gitano del Puerto de Santa Maria nos hace este Romance-[3], para algunos autores. Para otros, y parece ser la teoría más plausible, la desarrolló del prefacio de la misa gregoriana. Unos de sus nietos Antonio Jimenez Cantero "Chico Mellizo", - hijo de Antonio -, dejo grabada una Malagueñas.

Soleares

Para muchos estudiosos hablar de la soleá de Cádiz es hablar de la de "El Mellizo". Se le atribuyen tres estilos, uno valiente y solemne y otros dos de cambio o cierre. De estos, el primero posiblemente esté inspirado en los aires de Alcalá y el último puede que sea el primigenio desarrollado por el genial creador gaditano.

Seguiriyas

Paradójicamente los aires que le imprime a sus seguiriyas no son los de Cádiz si no los de los Puertos. Desarrolla dos tipos. La primera, inspirada en Triana, y la segunda totalmente original y propia de su exuberante genialidad. Sin duda es de las más grandiosas que existen.

Notas

  1. Tonadas populares en el área gaditana durante los años de la Guerra de la Independencia Española y el período liberal, según testimonios de historiadores y folkloristas.
  2. Las malagueñas es un palo del flamenco, tradicional de Málaga, es origen de los cantes de Levante y procede de los antiguos fandangos malagueños. Se convierte en estilo flamenco en la primera mitad del siglo XIX. Este cante no tiene baile propio pero tiene un gran registro melódico. Se acompaña a la guitarra por arriba y es un cante "ad libitum".
  3. Salió Bernardo a cazar / una nochecita oscura, / de perritos y lebreles / lleva cercaita la mula. / Se ha levantao un vientecito / y una agüita mu menua, / fue a ampararse a una torre / pa no mojarse la pluma. / Dentro de la torre suena / aquel de las fuerzas muchas, / está cantando un romance, / que Bernardo mu bien escucha. / Dicen que yo tengo un hijo / y que Bernardo le llaman, / toíto el que me viene a ver / me cuenta de sus hazañas. / Si no las tienes pa tu pare, / mi Dios,para quien las guardas: / Monta Bernardo a caballo / y pa El Carpio va que volaba. / Buen rey, deme uste a mi pare, / si mi obra se lo merece, / con el puño de mi espada / y mi manita prudente. / Pongase usté a trecho / que lo mando yo, / como si lo mandara / el gobernador.

Bibliografía

  • Francisco del Río Moreno: El Mellizo en el Cádiz de su tiempo (1848-1906). Cádiz.
  • Félix Rodríguez Lozano: Enrique "El Mellizo": Un siglo de su presencia. 2006.
  • Genealogía Jimenez

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