Por atún y a ver al Duque
Hacer algo con dos fines. Actuar de forma hipócrita, tratando de ocultar el verdadero propósito de una decisión anunciando como primera intención lo que es secundario. Este dicho proviene del Golfo de Cádiz, de la zona comprendida entre Barbate y Sanlúcar de Barrameda, con un abundante banco de atunes y donde se sigue usando el arte de la Almadraba. Durante el reinado de Felipe II, esas tierras pertenecían a Alonso Pérez de Guzmán, duque de Medina-Sidonia, y el padre Martín Sarmiento, un ilustrado benedictino nacido en Villafranca del Bierzo por el siglo XVII, narraba así el origen de la frase: “Cuando los señores Duques de Medina Sidonia residían en sus Estados y salían a divertirse viendo la pesca de los atunes en sus Almadrabas, concurría mucha gente, vasallos, y no vasallos de S.E., unos por verle, otros por obsequiarle, otros por todo; y casi todos por ver la pesquería, por comprar de camino algo de atún para su casa, o para traficar, así pues, debía ser la expresión: vamos a ver al señor Duque y de camino compraremos algo de atún.”
Así pues, cuando el duque andaba por allí, eran muchos los que se acercaban a medrar con él, con el fin de obtener algún beneficio, y por ello la gente utilizaba la excusa de ir a comprar atún cuando, en realidad, lo que buscaban era ver al duque.
Referencia: Enciclopedia Leotrón.
Principales editores del artículo
- Bretocino (Discusión |contribuciones) [3]
- Enke (Discusión |contribuciones) [1]