Monumento a Silos Morenos (Cádiz)
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Nombre de la escultura |
Monumento a Fray Domingo de Silos Moreno |
Localización |
Junto a la Catedral de Cádiz |
Promovida por |
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Escultor |
Leoncio Baglietto |
Dimensiones |
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Año de inauguración |
Siglo XIX |
Propiedad |
Ayuntamiento de Cádiz |
La idea de hacer una nueva Catedral en Cádiz se debe al canónigo Don Juan de Zuloaga, quién la propuso al Cabildo Catedralicio el 3 de julio de 1716, siendo Obispo de Cádiz D. Lorenzo Armengual y de la Mota. Se instaló la primera piedra el 3 de mayo de 1722, suspendiéndose las obras cuatro años más tarde, por falta de fondos, cuando ya se había construido hasta el arranque de la cúpula.
Así permanecía todavía en 1832 cuando se produjo un incendio en el maderamen que allí se almacenaba. Esto indujo al Excmo. Sr. General Gobernador Militar, Don José Manso y Solá, a encender en una sublime animación el espíritu resuelto del Dr. Fray Domingo de Silos Moreno, Obispo de Cádiz, animándole a continuar la paralizada edificación de la Catedral. Con una constancia digna de encomio y una fuerza de voluntad incontrastable, el 19 de octubre del mismo año emprendía la tarea que se encomendó y que más tarde inmortalizaría su nombre. Acudiendo a la generosidad del comercio y pueblo gaditanos, e invirtiendo en ello casi todas sus rentas, salva con denuedo cuantos obstáculos se van interponiendo en su labor, logrando al fin consagrarla el 28 de noviembre de 1838.
Debido a tan colosal esfuerzo, la ciudad agradecida enalteció su recuerdo con un monumento en la plaza donde está enclavado el Templo y a la que se dio su nombre como póstumo tributo. Para su ejecución se organizó un concurso de proyectos, fallándolo la Academia de Bellas Artes de Cádiz el 4 de septiembre de 1853, a favor de Leoncio Baglietto, escultor murciano. Al año siguiente ya se conflacionaba de bronce en el Arsenal de la Carraca.
El Monumento a Fray Domingo de Silos Moreno lo exhibe de cuerpo entero, en pie, bendiciendo al pueblo y sosteniendo es su mano izquierda los planos de la S. I. Catedral, sobre un sencillo pedestal, de piedra blanca, presentando en su cara anterior una lápida, también de bronce, con la siguiente inscripción:
- A FRAY DOMINGO DE SILOS MORENO, MONGE BENEDICTINO, OBISPO DE ESTA DIOCESIS, GRANDE EN VIRTUDES, QUE DIO AL CULTO DEL SEÑOR SUNTUOSO TEMPLO. SUS ADMIRADORES. AÑO 1856.
Una pequeña acera lo rodeaba en su primitiva situación, confeccionada en pidrecitas blancas intercaladas con otras negras, formando los emblemas de la ciudad y su catedral. En los primeros tiempos también estuvo resguardado por una verja de hierro. Cuando se reformó la plaza en 1893, se situó en lugar distinto a donde se encontraba. Posteriormente, hace unas décadas, con un nuevo cambio en la plaza de la Catedral el monumento se trasladó en una plazuela sita al lado de la torre de levante de nuestra Catedral.
El alcalde D. Javier de Urrutia, ya había intentado en 1846 erigir la estatua del Sr. Obispo para ejemplo de la posteridad. El Prelado se afligió con la noticia y prohibió que se llevase a cabo.
Bibliografía
- Manuel Guillén Rosón: Monumentos de Cádiz. Cádiz 1960
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