Hermandad de La Soledad (Chiclana de la Frontera)

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Bandera con el escudo de la Hermandad.

Hermandad de Nuestra Señora de la Soledad y Santo Entierro de Chiclana de la Frontera.

Historia

Cruz de Guía de la Hermandad.‎

Se estima que esta Hermandad tiene sus orígenes en los años finales del siglo XVII o principios del siglo XVIII, aunque no se puede descartar la posibilidad de que su existencia sea anterior a estas fechas, ya que tanto la anterior Capilla de la Soledad, como la propia imagen de Nuestra Señora de la Soledad, son de tiempo anterior, posiblemente del siglo XVI.

Por la documentación hallada en el Archivo Provincial de Cádiz, se sabe que en 1642 esta hermandad tenía su residencia canónica en el desaparecido convento de San Martín, de los Agustinos Ermitaños, que se encontraba en la actual calle Convento.

Paso del Santo Entierro en el interior de la Capilla de la Soledad.

Por otra parte, se sabe que la primitiva Capilla de la Soledad de Chiclana data del año 1525, según se desprende de algunas notas tomadas del Catastro Provincial de Cádiz, y que fue edificada por el mayorazgo de la finca para venerar a la imagen e Nuestra señora de la Soledad, que se encontraba en el pago de igual nombre. Aquella antigua capilla se cerró al culto en el año 1977, debido al mal estado de conservación que ya por entonces tenía y al peligro que presentaba por ello para los fieles.

La talla de Nuestra Señora de la Soledad es de autoría anónima y la más antigua de la ciudad de Chiclana. Se cree que fue realizada en el siglo XVI y durante años procesionaba con su hermandad desde la iglesia de las Monjas, sin el paso del Cristo y acompañada por el conocido como "coro de los Hermanitos de la Salle" y numerosos fieles.

En el año 1951 la hermandad adquiere la imagen del Cristo Yacente, obra realizada por el escultor isleño Antonio Bey. Con ello se cambia el nombre de la hermandad, que pasa a denominarse "Hermandad de Nuestra Señora de la Soledad y Santo Entierro de Cristo", procesionando ambas imágenes desde entonces en la estación de penitencia de la Hermandad.

A partir de 1960 se deja de hacer estación de penitencia quedando la Hermandad en aparente abandono, máximo cuando a raíz de la riada de 1965 desaparecen muchas de sus dependencias, por estar depositadas en la céntrica Iglesia de San Telmo.

Sería en el año 1968 cuando un grupo de jóvenes logra reorganizar la hermandad, que comienza una nueva línea ascendente a partir de entonces, en parte gracias a la labor del que fuera su director espiritual durante quince años, el padre Cesáreo Tejedor de los Agustinos Recoletos.

El día 8 de diciembre de 1979 se procede a la colocación de la primera piedra de la actual Capilla de Nuestra Señora de la Soledad, y a partir de entonces, y con la colaboración de gran parte del pueblo de Chiclana, se pudo ver realizado el sueño de verla concluida, algo que fue posible dieciocho años más tarde cuando fue bendecida el día 26 de mayo de 1996. En todo ese tiempo la hermandad continuó haciendo su estación de penitencia, saliendo de la capilla del Santo Cristo.

Pasos

La Hermandad procesiona con dos pasos, uno para el Cristo Yacente en su Santo Entierro y el otro para Nuestra Señora de la Soledad.

Sede

Tiene su sede en la Ermita o Capilla de la Soledad, situada a las afueras de la ciudad, en el camino hacia el viejo cementerio, siendo de todas las hermandades históricas la que tiene su residencia más alejada del centro de la ciudad.

Salida procesional

Procesión del Santo Entierro.

Realiza su salida procesional en la tarde-noche del Viernes Santo de la Semana Santa chiclanera haciendo estación de penitencia desde su sede hasta la iglesia de San Juan Bautista.

Los dos pasos de esta Hermandad han cambiado su estética en los últimos años; así, el paso del Cristo Yacente ha salido indistintamente dentro de su urna de madera y cristal o sin ella, ganando en este último caso más visibilidad.

De igual modo, el paso de la Virgen de la Soledad, que hace algunos años iba con palio y presentaba cargadores con horquillas -al estilo gaditano- por fuera del paso, bajo las maniguetas, ahora procesiona sin palio, con la imagen de la Dolorosa delante de una cruz desnuda donde cuelga un sudario blanco colgando y donde se apoyan dos escaleras vacías, una a cada lado.

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Bibliografía

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